Jueves  8 de febrero de 2018.

Traducir

Spanish Chinese (Simplified) English French German Greek Italian Japanese Norwegian Portuguese Russian
  • Tlacololeros
  • Encomendero
  • Mural del Palacio Municipal de Tixtla de Guerrero
  • Iglesia de Santa Prisca en Taxco
  • Entrada Fuerte de Acapulco
  • Museo de la Bandera en Iguala
  • Fábrica de hilados en El Ticuí
  • Danza de Los Apaches
  • Zona arqueológica Tehuacalco
  • Danza guerrerense
  • Santuario en Olinalá
  • Iglesia de Santiago Apóstol en Ometepec
  • Pescado a la talla
  • Museo Regional de Guerrero en Chilpancingo
  • Monumento a la Bandera en Iguala
  • Mujeres danzantes de Zitlala
  • Mural en la ciudad de Tixtla
Previous Next

Adquiera su ejemplar

  • Cartel Enciclopedia
  • Cartel Enciclopedia

Buscar en el contenido

Patrocinadores

  • Consejo de la Crónica de Iguala
  • Visita la Feria a La Bandera
  • Visita la Feria a La Bandera
  • Patrocinador 2015-2017
  • Patrocinador 2015-2017
Visitas desde el 24-Feb-2012
3729047
HoyHoy316
AyerAyer1673
Esta semanaEsta semana5176
Este mesEste mes9460
TodosTodos3729047
Día más visitado 05-03-2017 : 4625
UNITED STATES
US
Usuarios conectados 33

Diseño Web

Ing. Sandra de Jesús Sánchez

Ing. Fernando Sánchez Garibay

Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Córdoba Lara, Alfredo

Líder obrero y fundador de la Federación de Trabajadores del Estado de Guerrero (CTM). Nació en Chilapa en octubre de 1906; falleció el 9 de marzo de 1957. Hijo de José Aristeo Córdoba, abogado de origen michoacano y vinculado al primer levantamiento armado que se produjo en Guerrero en el presente siglo contra Porfirio Díaz, en 1901. Su madre fue Micaela Lara, maestra rural. Quedó huérfano de padre a los cuatro años y su propia madre fue su mentora.


Alfredo Córdoba Lara y Moisés Reyes Parra.

A los 10 años ayudaba a la precaria economía familiar en una pequeña fábrica de jabón que estableció su madre en Chilpancingo. A los 15 se incorporó a las filas obregonistas; el Manco de Celaya llamó a la lucha contra Carranza. La Revolución fue su escuela y se formó en el fragor de las batallas. Cuando Obregón asumió el poder, ascendió a capitán.

Fue un verdadero autodidacto, y aprovechando su excelente memoria y claro talento adquirió una vasta cultura. Tenía el don de la palabra y el convencimiento, y la facilidad de establecer amistad rápidamente. El licenciado Rodolfo Neri Lacunza, al ser electo gobernador del estado, lo llamó a colaborar en su gobierno como jefe del Departamento Administrativo dependiente de la Oficialía Mayor.

Al producirse la rebelión delahuertista, abandonó Chilpancingo en compañía del gobernador el 18 de diciembre de 1923, toda vez que el jefe de las Operaciones Militares en Guerrero se declaró a favor de Adolfo de la Huerta. El 24 de diciembre del citado año salió de Tlahuizapa a Dos Caminos, con el telegrafista y poeta Carlos G. Gómez Romero y otros obregonistas.

En enero de 1924 llegó con el gobernador Neri a la cuadrilla de El Refugio y siguió con él hacia Xaltianguis y El Ciruelar. En la defensa de Petatlán, el 23 de enero de 1924, resultó herido combatiendo contra Valente de la Cruz y el mayor Juan S. Flores. Derrotada la rebelión, el gobernador Neri regresó a Chilpancingo y más tarde Córdoba Lara, por su valentía y don de mando, mereció un reconocimiento especial del licenciado Neri en su libro La rebelión delahuertista en Guerrero.

Al concluir el gobierno del licenciado Neri se trasladó a Taxco y el líder innato que había en Córdoba Lara empezó a manifestarse al estructurar en la ciudad platera los primeros sindicatos de trabajadores de los hoteles y restaurantes. En aquella época fundó el semanario Alma Suriana. De Taxco pasó a Iguala, en la época en que se construía la carretera México–Acapulco, y se dio a la tarea de unificar a los trabajadores que trabajaban en esa vía, en la zona que comprendía al estado de Guerrero. Tuvo que hacer grandes esfuerzos, pues las compañías constructoras pretendían crear sindicatos blancos. Su casa en Iguala fue asaltada por mercenarios a los que repelió a balazos con ayuda de seis de sus correligionarios.

Aprovechó su estancia en Iguala a fin de crear sindicatos de trabajadores de la construcción. Luego se trasladó a Acapulco para fusionar a los trabajadores de hoteles y restaurantes, labor que después se transformó en la Sección XX del sindicato nacional.

En aquella intensa etapa de lucha sindical contó con el apoyo del presidente Lázaro Cárdenas, a quien conoció antes de su gobierno.

Trata a Fidel Velázquez, quien le apoyó para formar, en 1934, el Sindicato de Obreros y Campesinos del Estado de Guerrero, y en 1938, con eficaz ayuda de Emilio López Torres, fundó la Federación de Trabajadores del Estado de Guerrero.

Cuando sobrevino la postulación de Manuel Ávila Camacho para la Presidencia de la República, Córdoba Lara fue de sus principales seguidores en el estado de Guerrero. El día de las elecciones defendió una casilla en Iguala, de la que pretendían apoderarse los almazanistas; recibió dos disparos y una cuchillada que no lograron acabar con su vida.

Con ese carácter dio el apoyo de la organización sindical, en 1944, al general Baltasar R. Leyva Mancilla, quien se encontraba en Chihuahua como jefe de Estado Mayor del general Antonio A. Guerrero. El general Leyva se negó en principio a aceptar la postulación, aduciendo que nada sabía de política y que siempre había sido militar de carrera. Córdoba Lara viajó a Chihuahua para convencerlo y con el auxilio del general Guerrero llegó a la gubernatura, donde fue hombre eficiente.

En 1950 se pronunció por Alejandro Gómez Maganda para gobernador del estado y lo mismo hizo en 1957 a favor del general Raúl Caballero Aburto.

En 1961 logró obtener la libertad de su compañero de batallas sindicales Baltasar Hernández Juárez.   

(JPLC)